La generación del 98 es el nombre con el que se ha reunido
tradicionalmente a un grupo de escritores, ensayistas y poetas españoles que se
vieron profundamente afectados por la crisis moral, política y social
desencadenada en España por la derrota militar en la guerra
hispano-estadounidense y la consiguiente pérdida de Puerto Rico, Guam, Cuba y
las Filipinas en 1898.
Estos autores comenzaron a escribir en una vena juvenil
hipercrítica e izquierdista que más tarde se orientará a una concepción
tradicional de lo viejo y lo nuevo.
Características del movimiento.
1. Distinguieron entre una España real miserable y otra
España oficial falsa y aparente. Su preocupación por la identidad de lo español
está en el origen del llamado debate sobre el Ser de España, que continuó aún
en las siguientes generaciones.
2. Sienten un gran interés y amor por la Castilla
miserable de los pueblos abandonados y polvorientos; revalorizan su paisaje y
sus tradiciones, su lenguaje castizo y espontáneo. Recorren las dos mesetas
escribiendo libros de viajes, resucitan y estudian los mitos literarios
españoles y el Romancero.
3. Rompen y renuevan los moldes clásicos de los géneros
literarios, creando nuevas formas en todos ellos. En la narrativa, la nivola
unamuniana, la novela impresionista y lírica de Azorín, que experimenta con el
espacio y el tiempo y hace vivir al mismo personaje en varias épocas; la novela
abierta y disgregada de Baroja, influida por el folletín, o la novela casi
teatral y cinematográfica de Valle-Inclán. En el teatro, el esperpento y el
expresionismo de Valle-Inclán o los dramas filosóficos de Unamuno.
4. Rechazan la estética del Realismo y su estilo de
frase amplia, de elaboración retórica y de carácter menudo y detallista,
prefiriendo un lenguaje más cercano a la lengua de la calle, de sintaxis más
corta y carácter impresionista; recuperaron las palabras tradicionales y
castizas campesinas.
5. Intentaron aclimatar en España las corrientes filosóficas
del Irracionalismo europeo, en particular de Friedrich Nietzsche (Azorín,
Maeztu, Baroja, Unamuno), Arthur Schopenhauer (especialmente en Baroja), Sören
Kierkegaard (en Unamuno) y Henri Bergson (Antonio Machado).
6. El pesimismo es la actitud más corriente entre ellos y la
actitud crítica y descontentadiza les hace simpatizar con románticos como
Mariano José de Larra, al que dedicaron un homenaje.
7. Ideológicamente comparten las tesis del Regeneracionismo,
en particular de Joaquín Costa, que ilustran de forma artística y subjetiva.
8. Ofrecen un carácter subjetivo en sus obras. La
subjetividad toma mucha importancia en la Generación del 98 y en el modernismo.
EL TIEMPO
2.1. EL TIEMPO
Antonio Machado se llamaría a sí mismo, por boca de Juan de
Mairena, “poeta del tiempo” Machado entiende el tiempo como algo vivo,
personal, no como concepto o abstracción. Es la duración ilimitada, la historia
individual de cada ser —de su propio ser—, que se hace, que pasa, pero que
permanece en el recuerdo, donde se borran los límites personales.
2.1.1. EL POEMA: LA PALABRA ESENCIAL EN EL TIEMPO
Para él, la poesía es un arte eminentemente temporal.
Recordemos de nuevo estas dos frases, que sintetizan todo su pensamiento
poético: La poesía es la palabra esencial en el tiempo
Antonio Machado une así los dos elementos contradictorios:
lo esencial y lo temporal. La poesía es la palabra que expresa lo que son las
cosas (su esencia), pero a través del contacto con ellas, con la experiencia,
con el tiempo vivido.
2.1.2. EL AGUA
El agua del río, de la fuente, de la lluvia su fluir —que a
veces se hace cantar— casi imperceptible, constante, se hace símbolo del fluir
temporal y, por ello, de la vida interior.
Sin embargo, el agua puede representar la muerte, quieta en la taza de
la fuente o, manriqueñamente, en la
inmensidad del mar al que confluyen todas las aguas.
2.1.3. LA TARDE
Suele expresar el sentimiento melancólico de la vejez
espiritual. Por esto, la hora vespertina se acompaña frecuentemente de
adjetivos que connotan un estado de ánimo de depresión espiritual (cenicienta,
mustia, destartalada, triste otras veces clara) y que contribuyen a
personificarla, identificándola con su estado de ánimo:
A su vez, los adjetivos referidos a colores que acompañan a
la tarde y a los elementos del paisaje en esa hora (rojos, cárdenos, rosados,
violetas) se cargan de estas
connotaciones de melancolía y tristeza, llegando a constituirse el conjunto en
una clara personificación.
2.1.4. LOS CAMINOS
Los caminos están presentes en la poesía de Antonio Machado
desde sus primeras composiciones. El caminar errante, sin meta prefijada, es
ante todo un sentimiento de pesar sin consuelo, una nostalgia de la vida que se
va dejando, La sed del caminante, que no puede calmar agua ninguna, es su ansia
siempre insatisfecha de conocer su propio destino. Por tanto, los caminos son
frecuentemente símbolos de la vida o bien aparecen asociados con ésta.
2.1.5.LOS ELEMENTOS DEL PAISAJE Y EL TIEMPO VIVIDO
En ese proceso de identificación, adquieren especial
relevancia en la poesía de Antonio Machado, los elementos que conforman el
paisaje. En su paso por el tiempo el poeta se relaciona con las cosas, y éstas
—el río, los árboles, el atardecer— adquieren un sentido nuevo, personal, en
relación con la experiencia vivida en torno a ellas. Se transfiguran en espejo
que refleja los estados del alma.
2.1.6. EL RELOJ
No se trata en este caso de un símbolo. Machado se refiere
siempre al reloj real, que mide el tiempo cronológico. el reloj no sea uno de
los tópicos más frecuentes en la poesía de Antonio Machado
2.2. LA MUERTE
Sus reflexiones sobre la muerte son la derivación lógica de
sus inquietudes sobre el tiempo, considerado éste como el gran exterminador. La
muerte se manifiesta de continuo: la brevedad e inconsistencia de la vida, la
decadencia de los hombres y de las cosas, de los elementos de la naturaleza,
los signos múltiples de la destrucción, de la enfermedad, de la guerra, del
crimen. Los símbolos relacionados con la muerte son numerosos: el mar, el
ocaso, el otoño, la sombra, la luna.
2.3.DIOS
2.3.1. UN DIOS CREADO
La presencia de Dios en la obra de Antonio Machado es
imprecisa y variable en el tiempo y, sin embargo, ocupa en su pensamiento un
lugar significativo. El Dios de Machado es un Dios filosófico cuya noción se
depura con el tiempo y la reflexión. Es un Dios de silencio y de ausencia; y
más que un Dios creador es un Dios creado por la necesidad de la imaginación
del hombre
2.3.2. CRISTO
La figura de Cristo es mucho más cercana a Machado que ese
“Dios entre la niebla” que busca sin alcanzar. Jesucristo es en él el paradigma
del hombre, lo que éste tiene de humano y divino, de carne mortal que sueña la
inmortalidad, el triunfo sobre la muerte: “el que anduvo en la mar”
2.3.3. LA RELIGIOSIDAD POPULAR
Esta búsqueda de Dios no se realiza al modo de la fe
popular, donde la devoción se mezcla con la superstición o con la mera
apariencia social. Esta religiosidad popular la ve sostenida por una Iglesia a
la que ataca con dureza, porque en ella predomina la organización terrenal que
le da poder sobre la fe sincera y verdaderamente cristiana
2.4. EL RECUERDO Y EL SUEÑO
En Machado son muchas veces términos equivalentes, ya
normalmente se refiere al soñar despierto con la propia vida. En Soledades...
los caminos del sueño son galerías de espejos donde se refleja la propia vida,
donde el hombre que sueña intenta
revelar el secreto de su yo más íntimo. Las galerías del alma son símbolos predilectos
de Machado para representar esa parte de sí mismo que ignora.
2.5.EL AMOR
A lo largo de la obra de Antonio Machado se advierte o se
intuye el deseo de amar, la necesidad del amor. Es una presencia constante y,
sin embargo, difícil de precisar en muchos de sus poemas. Indudablemente es un
sentimiento expreso en muchos poemas de Soledades..., pero la nota predominante
en ellos es la del desengaño o el olvido. Algo parece siempre alejar, en la
imaginación del poeta, el objeto de su amor
2.6.EL TEMA AUTOBIOGRÁFICO
En numerosos poemas evoca su infancia, su juventud, sus
amores, incluso sus experiencias de la vida cotidiana. Pero no sólo aparece la
biografía externa, sino, especialmente, la espiritual. En este sentido, su
poesía puede considerarse un diario de su propia alma, una vida hecha verso,
que así escrita puede eternizarse: la palabra esencial en el tiempo; el diálogo
del hombre, de un hombre con su tiempo.
2.7. EL PAISAJE Y EL TEMA DE ESPAÑA
el paisaje se convierte en símbolo del pasado histórico de
Castilla. Por fin, en otros poemas, los elementos del paisaje castellano se
convierten en símbolo de realidades íntimas. Estos tres modos de enfocar el paisaje
castellano tendrán su exacto equivalente respecto al paisaje andaluz en los
poemas escritos para la segunda edición, durante su estancia en Baeza, ciudad a
la que ‘huirá’ tras la muerte de su esposa”.
Figuras Retóricas utilizadas por Antonio Machado en su poesía:
La plaza tiene una torre, la torre tiene un balcón,
el balcón tiene una dama,
la dama una blanca flor
Tengo una copa en la
manoy en los labios un cantar,
y en mi corazón más penas
que gotas hay en el mar
y en los desiertos arena
¡Oh, dime, noche amiga, armada vieja,que me traes el retablo de mis sueños
siempre desierto y desolado, y sólo con mi fantasma dentro...
El ojo que ves no
esojo porque tú lo veas;
es ojo porque te ve
Y cuando llegue el día
del último viajey esté al partir la nave que nunca ha de tornar...
Todo pasa y todo
queda,
pero lo nuestro es pasar,
pasar haciendo caminos
caminos sobre la mar
Y todo en la memoria
se rompía, cual una pompa de jabón al viento
Los versos preferidos son los clásicos de la tradición
española: el octosílabo, de tradición popular, en todas sus variantes rítmicas;
y el endecasílabo, de tradición culta. Éste último es frecuente en ritmo
enfático (acento en la primera sílaba) y heroico (primer acento en la segunda
sílaba). En numerosas ocasiones, el endecasílabo aparece combinado con el
heptasílabo.
1. ESTROFAS EN VERSOS DE ARTE MENOR
Romance { a – a – a – a – a – a} El más significativo es la
larga composición La tierra de Alvargonzález [CC – CXIV][27]. También usó del
romance en heptasílabos (endecha[28])y en hexasílabos (romancillo
Cuarteta {a, b, a, b} Muy frecuente en toda su obra
Redondilla {a, b, b, a}
Copla {—, a, —, a}
Seguidilla, bien en la forma tradicional {7—, 5a, 7—, 5a,
5b, 7—, 5b}
Soleá {a, —, a}[35], con las variantes de la soleá en
hexasílabos[36]y la soleá playera {6—, 8a, 6—}
Quintilla, en combinaciones varias de rima
Décima, en la combinación {a, a, b, c, c, b, d, e, e, d}
Silva octosilábica (combinación libre de un número indeterminado
de versos octosílabos y tetrasílabos)
La silva es una estrofa de origen italiano consistente en la
combinación libre de un número indeterminado de versos endecasílabos y
heptasílabos, cuya rima también se distribuye libremente. En Antonio Machado
las formas más frecuentes son:
Silva aconsonantada: en ella, todos los versos riman en
consonante, sin quedar ninguno suelto. La combinación es libre.
Silva arromanzada: serie libre de endecasílabos y
heptasílabos rimando como en el romance {por ejemplo: 7—, 7a, 7—, 11a, 11—,
11a, 11—,7a, 11—, 7a, 11—, 11a, 7—, 11a
4.2.4. ESTROFAS EN ALEJANDRINOS
Pareados: en series más o menos extensas[45].
Serventesios {A, B, A, B}[46].
Combinaciones de pareados y serventesios[47].
Soneto en alejandrinos con serventesios en lugar de
cuartetos[48].
4.2.5. ESTROFAS EN OTROS VERSOS DE ARTE MAYOR
Serventesio en eneasílabos[49].
Romance heroico en decasílabos
Silva en decasílabos y pentasílabos
Serventesio y cuarteto en dodecasílabos
Quinteto agudo en dodecasílabos{A, A, B, B, —‘}
Silva en hexadecasílabos y octosílabos
Combinación de endecasílabos y alejandrinos
4.2.6. VERSO LIBRE
Aunque Machado nunca llegó a utilizar el versículo o línea
poética (verso sin medida fija ni rima), sí practicó —aunque en contadísimas
ocasiones— el verso libre (versos sin medida fija, pero con rima, y que no
forman una estrofa prefijada)
EJERCICIO
1. Machado nació en ........ y murió en ........
2. Pertenece a la generación .......
3. Estudio en ........
4. Escribió en varios géneros pero destaco en .........
5. Fue catedrático de .........
6. Se casó con ...........
7. Tiene ....... temas principales.
8. Dos temas principales que no sean ni Dios ni el Tiempo.
9. Dos subtemas de Dios.
10. Dos subtemas de el tiempo.